Ahora empieza a llover.
La lluvia me recuerda a ti, y es precisamente en tardes como esta cuando no puedo evitar recordarte, recuerdo tu calor, tu aroma, tu tacto, suelo recordar esos pequeños detalles que solo pueden palparse, esas cosas que no puedo ver en una fotografía, incluso ahora me parece estar viéndote bailar bajo la lluvia, porque es en tardes como esta cuando mas necesito de ti.
Me siento junto a la ventana y enciendo un cigarrillo y mientras se consume, miro como cae la fina la lluvia, a veces lenta, otras de manera intensa, y así paso las horas. ¿Por qué no estas aquí? Pienso una y otra vez, sin dejar aflorar las palabras, sólo las pienso, las saboreo, tal vez incluso las dibujo en mis labios sin dejarlas salir. Instantes después de preguntármelo siento la incesante necesidad de coger el teléfono y marcar tu número, aunque solo sea para escuchar tu voz, para saber que estas ahí. Sin embargo, no lo haré, nunca lo hago y pasare la tarde así, como tantas otras, sentado, con el teléfono en la mano, mirando como cae la lluvia, tal vez en algún momento marque tu numero, pero lo borraré, como debería haberlo borrado de mi mente. Y pasaran las horas, hasta que oscurezca, llegará la noche y será una noche fría, oscura y triste. Entonces será demasiado tarde ,tarde para marcar, para llorarte, para seguir alimentando mis recuerdos, incluso ahora que apenas empieza llover ya es demasiado tarde, lo sé…
Sé que podría irme ahora, podría salir y alejarme del maldito teléfono, pero tal vez no quiera, realmente no quiero hacerlo podría aborrecerme por ello, o podría aborrecerte a ti, sin embargo aquí estoy, porque al fin y al cabo, la lluvia, el teléfono, la ventana, sólo son excusas, excusas para no olvidarte, porque estas tardes las guardo sólo para ti…
La lluvia me recuerda a ti, y es precisamente en tardes como esta cuando no puedo evitar recordarte, recuerdo tu calor, tu aroma, tu tacto, suelo recordar esos pequeños detalles que solo pueden palparse, esas cosas que no puedo ver en una fotografía, incluso ahora me parece estar viéndote bailar bajo la lluvia, porque es en tardes como esta cuando mas necesito de ti.
Me siento junto a la ventana y enciendo un cigarrillo y mientras se consume, miro como cae la fina la lluvia, a veces lenta, otras de manera intensa, y así paso las horas. ¿Por qué no estas aquí? Pienso una y otra vez, sin dejar aflorar las palabras, sólo las pienso, las saboreo, tal vez incluso las dibujo en mis labios sin dejarlas salir. Instantes después de preguntármelo siento la incesante necesidad de coger el teléfono y marcar tu número, aunque solo sea para escuchar tu voz, para saber que estas ahí. Sin embargo, no lo haré, nunca lo hago y pasare la tarde así, como tantas otras, sentado, con el teléfono en la mano, mirando como cae la lluvia, tal vez en algún momento marque tu numero, pero lo borraré, como debería haberlo borrado de mi mente. Y pasaran las horas, hasta que oscurezca, llegará la noche y será una noche fría, oscura y triste. Entonces será demasiado tarde ,tarde para marcar, para llorarte, para seguir alimentando mis recuerdos, incluso ahora que apenas empieza llover ya es demasiado tarde, lo sé…
Sé que podría irme ahora, podría salir y alejarme del maldito teléfono, pero tal vez no quiera, realmente no quiero hacerlo podría aborrecerme por ello, o podría aborrecerte a ti, sin embargo aquí estoy, porque al fin y al cabo, la lluvia, el teléfono, la ventana, sólo son excusas, excusas para no olvidarte, porque estas tardes las guardo sólo para ti…
6 comentarios:
Soy la primera en seguir este blog, ya puedes quitar la cuenta.
Este texto es más bonito que tú, que ya es decir.
Veo que has comenzado un blog literario. Me alegro, tiene buena pinta. Ánimo con él.
Saludos
Fusa no se equivocaba, me iba a gustar tu casa, y espero que a ti la mía, porque serás bien acogida, porque huelen parecido y porque mi ventana, fíjate, está justo enfrente de la tuya, viendo el humo y la lluvia, como excusas para combatir al olvido...
Me ha encantado tu entrada inaugural y espero leer muchas más.
Besos
Me ha parecido muy bello tu texto, la verdad, es precioso para inaugurar un blog. Envidio el don que muchos tenéis con la prosa, algo de lo que carezco, la verdad.
Últimamente muchos blogs de los que leo hacen referencia a la lluvia como algo bastante triste.
Me creo la excepción que rompe la regla. La lluvia limpia recuerdos sucios, hace disfrutar de su sonido cual banda sonora, te refresca si andas cuando cae, e incluso te da momentos en familia e íntimos que no recordamos casi nunca porque el cielo se veía gris, pero detrás de esas gotas pasan muchas cosas positivas.
Saludos de alguien que odia el Sol.
Emi: Estoy de acuerdo contigo, la lluvia no tiene porque ser algo triste, para mi es algo que me inspira un sentimiento melancólico y eso es muy positivo, los recuerdos siempre lo son.
Un saludo para ti.
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